Leídas las declaraciones del Portavoz del Grupo Municipal Socialista Francisco Lebrero en el Diario “Viva”, cabe decir que son de lo más ingrato nunca leído. Después de la “herencia” sufrida no se cómo se atreve a comentar que “la varita para solucionarlo todo en tres meses no ha funcionado” cuando su propio gobierno, después de más de cuatro años, no supo enderezar el rumbo económico del Ayuntamiento máxime cuando en todo momento escondieron la abultadísima deuda que arrastraban. Es cierto que las medidas anunciadas por el P.P. no corresponden con el programa electoral planteado. Tanto o más cierto es que los números arrojados por las auditorías realizadas no corresponden ni por asomo con lo denunciado in exttremis por el Gobierno del Partido Socialista. A mi entender María José García de Pelayo, actual alcaldesa, ha colaborado y tenido una transparencia infinita en sus cien días de gestión que para sí la quisieran muchos. Ningún Gobierno Municipal, hasta ahora, se ha preocupado tan siquiera de vigilar la gestión realizada por el Director de Onda Jerez –Pedro Royan- ya destituido de su cargo, pero que todavía, a pesar del medio millón de euros devengado, tiene que percibir supuestamente otro tanto por rescisión de su contrato.
Si lo que duele de la gestión de María José es el destape de todas estas lindezas para que no se airearan, preferibles sería que lo hubiera hecho Pilar Sánchez, en ese afán de colaboración que tanto se expone hoy desde la oposición el Sr. Lebrero. ¿Le parece poco apocalipsis intentar aún la debacle acaecida durante su “reinado”, -intentar renovar otro cuatrienio-, incluso a costa de muy serios disgustos y enfrentamientos con compañeros de partido que se negaban a ello? Ellos sabían que la gestión de Pilar había sido nefasta y que el pueblo la haría pagar. Todo esto sí que fue una apocalíptica situación. Ocurrió afortunadamente lo que tenía que ocurrir. No hay más historietas. Trabaje usted Sr Lebrero en plantear una buena oposición que siendo así se transformaría en brillante. Pero no la haga usted de la forma que ahora lo hace: no creyendo ni sus propios argumentos.
En fin, las declaraciones del Sr. Lebrero como Portavoz del Grupo Municipal Socialista tienen desperdicios en toda su extensión. Pero vamos tampoco merece una dedicación más extensa, porque lo que se expone en ella (la entrevista) es solo lo que ellos debieron de hacer y no hicieron. Si esto es hacer oposición que venga Dios y lo vea. Así nos luce el pelo. Un partido político en la oposición no es cualquier cosa, ni tiene que defender su situación como tal como si fuera un partido de fútbol. A los tuyos con razón o sin ella.
Creo que el PSOE lo primero que debiera plantearse es arreglar sus propias diferencias dentro de su casa. Seguro que necesitará más de cien días, los llamados “críticos” son disconformes con el apoyo que Pilar Sánchez ha realizado a favor de Cabaña. Sigue latente la división existente dentro del partido, seguro que le trae serios problemas el 20-N como así ocurriera en las Municipales. Están a tiempo todavía para enmendar yerros pero no caben confianzas ni pérdidas de atención a sus propios problemas entreteniendo la atención en un juicio crítico sobre los cien días de María José G. Pelayo. Realizado además de manera muy forzada, buscando argumentos con poca base,
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