SUBVENCIONES DEL ALMA MIA

Desde hace un tiempo bastante considerable se viene cuestionando en demasía el tema de las instalaciones de antenas para la telefonía móvil. La queja principal, según “Solidaridad” se basa en que no se cuenta para nada con los “vecinos”; o sea, con aquellas asociaciones federadas en el seno de la misma. No sé hasta qué punto el Ayuntamiento necesita de esa autorización para poder dar luz verde a estos enseres tan necesarios para que la señal no quede aparcada ante las constantes nuevas tecnologías, no propiciando que aquellas instalaciones de ayer estén obsoletas al día de hoy. Entiéndase por obsoleto quedar una cosa vieja siendo aun nueva por surgir tecnologías más eficientes. Estimo que si estas nuevas antenas no se colocaran, abortando así una superación inminente, sería motivo de quejas, manifestaciones, exposiciones y otras alternancias en dicho camino por parte de los componentes de “Solidaridad”. Entiendo que no todas las quejas provienen de sus afiliados sino más bien del entorno directivo de la Federación.
Mientras que la Federación no tenga una autonomía económica propia. Me explicaré, un saldo en caja para afrontar sus necesidades económicas más inminentes, sin depender de las subvenciones del Ayuntamiento, la Federación será algo que yo sé pinchado en un palo. Las Asociaciones de Vecinos asociadas con su contribución económica mensual, semestral o anual son las que deberían de hacer frente a sus obligaciones económicas precisas para subsistir. Tengo entendido –es solo un rumor- que estas en número importante no pagan sus cuotas a pesar de lo insignificante de las mismas. En fin el movimiento vecinal actual está montado en cimentaciones muy débiles que poseen, todas sin excepción, locales propiedad del Ayuntamiento –por los que no pagan nada- y que sirven más que nada para programar festejos de verbenas en verano y campeonatos de dominó y otros en invierno. Pero si no hay subvenciones nada de esto se podrá hacer. Yo me pregunto, en los actuales momentos de crisis ¿no sería mejor emplear este dinero, caso que lo hubiere, en cosas de más provecho?
Es de valiente y bravo que dependiendo en gran medida del Ayuntamiento tanto en locales, mobiliario, subvenciones; algunos también teléfonos, agua etc. no restan ánimos para osar o emprender denuncias como aquellas en la que se basa este artículo. Está claro, las asociaciones vecinales y la Federación está para eso, son como la oposición política de aquellos que nos gobiernan. Por esto mismo no deben de estar alineados con ninguna fuerza política, deben de ser independientes en todos los aspectos, incluido el económico. Esto traería consigo a los vecinos (asociaciones) una muy seria participación de cuotas que pasarían de ser, como hasta ahora más bien poco significativo a unas nuevas de más calado económico.
El mundo vecinal en Jerez desde su fundación ha tenido excelentes líderes que por no estar en la actualidad en primer plano dejan de estar preocupados con sus problemas; algunos también con un ego muy subido en aras de vanidades sorprendentes y muy particulares. Ha sido, también es verdad, escuela de políticos, pero sin gran alcance, por lo que no resulta nada atractivo ni provechoso su inclusión en listas. Los que se atrevieron, si lo hicieron con el ánimo de completar esas listas, puede que acertaran, pero en cambio si optaron a ir entre los seis primeros fracasaron estrepitosamente. Quintana fue uno de ellos y Casal puede ser otro.